La táctica futbolística se ha convertido en un apartado fundamental para alcanzar los éxitos en el mundo profesional, ya que ha llevado a equipos sumamente inferiores a sus rivales a conseguir logros destacados e inesperados gracias a un trabajo táctico y un esquema acertado.
Uno de los apartados más importantes y que además más peso están cogiendo en el fútbol es la táctica. Los sistemas, las funciones de cada jugador sobre el campo y lo que pretenden los entrenadores de un partido pueden hacer variar el resultado de un choque y conseguir cambiar cualquier pronóstico.
Lo primero y más importante es que, como ocurre con otros deportes como el tenis, quizás su táctica no parezca tan relevante en los resultados. De hecho, históricamente ha ido variando este apartado, hasta llegar a un momento en el que se ha convertido en un aspecto fundamental del juego.
La variación del esquema
Lo primero de todo es el esquema a utilizar, algo que también ha ido variando a lo largo de la historia del fútbol. Uno de los más típicos es el 4-4-2, (cuatro defensas, cuatro centrocampistas y dos delanteros), pero también tienen su notabilidad histórica esquemas como el 4-3-3, el 4-5-1 o el 3-4-3. En la actualidad parece que se tiende a reforzar el centro del campo con deportistas muy potentes físicamente que actúan como carrileros, y eso ha creado el 3-5-2 tan utilizado en los últimos años.
Aunque es importante saber que cualquiera de estos dibujos son móviles, es decir, no son estáticos y pueden sufrir variaciones voluntarias o no a lo largo del partido. Un ejemplo de esto último se puede ver reflejado en aquellos equipos que deciden defender descolgando a alguno de sus jugadores, lo que modifica el esquema en función de si se está atacando o defendiendo.
La posición clave de cada jugador
Una vez dentro de los sistemas, el entrenador le da una o varias funciones específicas a cada uno de sus 11 jugadores, y aunque desde fuera pueda parecer que los dos centrales tienen que jugar igual, más bien es al contrario, cada uno tendrá un papel diferente que desempeñar al de su compañero en la zaga.
Y aquí es donde reside una de las grandes riquezas tácticas del fútbol actual, ya que se están consiguiendo igualar las fuerzas de los equipos históricos con los de menor entidad, que tratan de respetar siempre el reglamento del deporte rey, logrando que cada vez más los pronósticos cambien en el curso de un mismo partido y hay grandes sorpresas que antes no sucedían.
Equipos que se aprovechan más del trabajo táctico
Uno de los grandes equipos que han conseguido aprovechar el trabajo táctico a su favor para igualar fuerzas con clubs de más poder económico, es sin duda el Atlético de Madrid. Desde la llegada de Diego Pablo Simeone ha conseguido logros muy destacados, compitiendo siempre con Real Madrid y FC Barcelona, además de haberse convertido en uno de los rivales más poderosos de la Champions League.
Así, los rojiblancos son pacientes y saben esperar sus oportunidades para conseguir pelear por los títulos. Algo que por ejemplo les ha llegado esta temporada, en un momento en el que la competición y las apuestas de LaLiga marcan a los colchoneros como favoritos, gracias a su buena primera vuelta y a los continuos pinchazos de sus rivales. Solo una debacle suya parece que podría teñir esta Liga 2020-2021 de otro color que no sea el rojiblanco.
Siguiendo con este ejemplo, el Atleti ha logrado gestas muy importantes eliminando en la Champions a algunos de los favoritos, como conviene recordar con aquella victoria en Anfield del pasado curso leyendo la crónica del AS, triunfo en el que la estrategia defensiva de Simeone cobró sus frutos.
Eso sí, mientras era una de las referencias mundiales en cuanto a juego táctico, los rojiblancos y El Cholo han servido de inspiración para que otros grandes conjuntos logren gestas muy destacadas para ellos gracias a un modelo similar de competitividad. Aquí se pueden resaltar las actuaciones del Leicester City y su conquista de la Premier League 2015-2016, o en España un recién ascendido como el Granada que logró la clasificación para la UEFA Europa League, campeonato en el que además ha alcanzado la fase de eliminatorias.
En definitiva, parece que con la profesionalización del fútbol, cada vez la táctica cobra un peso más específico en el juego y es muy difícil pronosticar resultados concretos, ya que son muchos los equipos que apuestan por un buen trabajo en este apartado que les suele conducir al éxito.
