EL BALONCESTO ES UN DEPORTE QUE REQUIERE CIERTAS HABILIDADES:
UN DEPORTE TÉCNICO:
La expresión de un jugador en un campo no puede lograrse sin un control perfecto del balón (ambidiestro), un control perfecto de las distintas paradas (ligado a las sutilezas del mercado asociadas a la necesidad de jugar rápido), cualidades naturales de habilidad (especificidad del objetivo horizontal) y la noción de equilibrio es esencial. Entre los jóvenes, esto se traduce clásicamente como «fundamentos».
LA IMPORTANCIA DE LA MENTE:
Como en todos los deportes una vez que la competencia ha comenzado, el control del estrés antes y durante el juego es importante. Esto es aún más fuerte en el baloncesto porque todas las acciones pueden tener un impacto inmediato. Siendo el terreno relativamente pequeño, se requiere concentración. En cuanto al propósito del baloncesto, que es tirar, esta mente está relacionada con la habilidad de los jugadores de ignorar el ajedrez para poder concentrarse en las siguientes acciones.
UN DEPORTE TÁCTICO:
Si se adquiere el dominio de los fundamentos individuales: la aplicación muy precisa de la noción de espaciamiento – o la colocación precisa de los jugadores en el campo (en relación con la superficie del campo una vez más), la interrelación entre los jugadores es muy compleja y la importancia de jugar sin un balón primordial.
La noción de rendimiento, generalmente vinculada a los logros y al alto nivel en el deporte, es más que eso. En primer lugar, se trata de definir el potencial de su grupo, de sus jugadores individualmente, para evaluar el nivel máximo de potencial de su equipo en competición.
El rendimiento no está exclusivamente relacionado con el alto nivel, sino con la capacidad del atleta para alcanzar este máximo potencial. Yo iría aún más lejos en la medida en que el rendimiento no es el logro de este potencial, sino la capacidad de ir más allá de ese límite.
El rendimiento es la capacidad de un individuo o de un equipo para lograr el resultado esperado (de lo contrario, contra el rendimiento) y, a continuación, superar el objetivo y mejorarlo (entramos aquí en «hacer un rendimiento»).
Para lograr esta «infusión», se deben tener en cuenta varios factores previos a la competencia. Trataré de enumerarlos adaptándolos a nuestro deporte de Baloncesto. Estos factores se enumerarán a continuación por orden de importancia (opinión muy personal).
1- FACTORES TÉCNICOS
El baloncesto tiene la característica específica de que, contrariamente a lo que la sociedad piensa, es sobre todo un deporte individual. Esto es provocativo, pero hay que tener en cuenta que el dominio técnico individual de todos los fundamentos básicos es esencial. Es difícil imaginar que un equipo pueda ser eficaz si los elementos que lo componen son técnicamente incapaces de disparar un tiro, por ejemplo.
Por lo tanto, los elementos a dominar de forma óptima son los siguientes:
- LOS APOYOS: Control de los soportes (imprescindibles para el tiro) y de las diferentes paradas/arranques en el regate: simultáneo, alternativo, prellamada, enganchado, borrado, secuencia simple, desplazado, invertido…. etc).
- DRIBBLE: Control perfecto del balón, ambidiestro (Todos los cambios de dirección, regate de contraataque, progresión, golpes, protección,…………… etc.).
- TIRO: Adquisición de los gestos de los diferentes tiros (Lay up, power lay up, hook shot, full foot shot, free shot, lay back, suspended shot…), mejora de la mente en este campo.
- EL PASE: Ambidiestro, dominio de los diferentes tipos de pases que responden a situaciones de baloncesto.
- INVERSIONES DEFENSIVAS: Aprender movimientos defensivos, dirección de colocación y movimiento (conocer las reglas sobre faltas), actitud general: doblado, ligeramente en el antepié, mano para disuadir de disparar o perseguir el balón, orientación del defensor en relación con las opciones tácticas (eje o línea de fondo).
2- LA GESTIÓN DE UN GRUPO:
Después de la adquisición de estos fundamentos (desde la más temprana edad) viene la noción de colectivo. No se trata del acuerdo sobre el terreno o del aspecto táctico, sino de las consecuencias de gestión del coaching y del «coaching» de un grupo que debe llevarse bien. Así podemos especificar la importancia de varios puntos:
- La creación de cohesión en las sesiones de formación (manteniendo el rigor)
- Adhesión a un proyecto, un objetivo común
- La gestión del grupo durante la competición, definiendo el papel de cada uno, gestionando el tiempo de juego y por tanto los egos.
Nótese la diferencia en el manejo entre el cuidado de un grupo de niños y niñas. El enfoque psicológico es importante en relación con el campo técnico de las niñas.
3- FACTORES BIOLÓGICOS:
Dado que los deportes tienen sus propias particularidades, el baloncesto no es una excepción a la regla. Las cualidades necesarias para poder expresarse en el mejor de los casos se encuentran en varias áreas. Todas estas cualidades tienen en común que se explican por el tamaño del campo, que es pequeño en comparación con el número de jugadores.
En primer lugar, la velocidad es esencial, porque el baloncesto es un deporte caracterizado por una sucesión de carreras, cambios de ritmo y de dirección. De ahí la necesidad de reactividad y la capacidad de transitar muy rápidamente en distancias cortas o muy cortas. Hay que desarrollar imperativamente la velocidad en los jóvenes, sobre todo porque su capacidad respiratoria está en pleno desarrollo.
La consecuencia del punto anterior es la capacidad de recuperación rápida, ya que los períodos de descanso (en el campo) son muy cortos. Así, después de la parte inferior, las preparaciones físicas se realizan principalmente en el camino anaeróbico con un entrenamiento de circuito especialmente adaptado en el «tiempo de baloncesto».
Por último, la particularidad de que el baloncesto es el objetivo situado en altura, resulta del hecho de que el tamaño es un elemento biológico importante al menos en el nivel alto. Los jugadores más pequeños que tienen éxito a niveles muy altos generalmente tienen características de velocidad y relajación mucho más allá de lo normal.
4- FACTORES PSICOLÓGICOS :
Este campo es muy amplio, pero siempre para acercarme lo más posible a la noción de rendimiento, me centraré aquí en el momento de la competición.
Lo más importante para lograr una actuación es la capacidad de controlar el estrés antes y durante el juego. Cada jugador tiene sus propios hábitos, sus propios reflejos, su manera de acercarse a los encuentros (aislarse, bromear, escuchar música…).
Durante el partido, la capacidad de «rebotar» muy rápidamente después de un error cometido. Esto es muy importante en el baloncesto, ya que la noción de transición (de defensor a atacante y viceversa) se repite una y otra vez durante el partido.
Además, estos errores son sancionados inmediatamente dada la reducida superficie de juego y las cualidades de velocidad de los jugadores. El equipo puede compensar hasta cierto punto, pero tanto como en el fútbol se puede jugar con 10 jugadores y mantener el partido tanto en baloncesto, es difícil concebir la posibilidad de defender o atacar con 4 contra 5 (si un jugador está en contra de la ventaja de los cambios).
Finalmente una noción si no LA noción indispensable, la MENTAL. Por ejemplo, los jugadores etiquetados como compradores han experimentado períodos de gran éxito y, por el contrario, series catastróficas. Este es un dato muy variable en el sentido de que estos estados no pueden ser explicados por la técnica ya que el jugador tiene el mismo gesto. En este caso, no debemos permitir que la duda se apodere de nosotros. Es por eso que en algunos juegos no te sorprenderá ver a un jugador disparar mucho cuando su éxito es bajo. No le corresponde al jugador dejar de disparar, sino al entrenador sacarlo. Si lo dejamos en el campo, debe disparar porque ese es probablemente su papel.
5 – FACTORES TÁCTICOS:
Por último (esto puede ser sorprendente ya que el baloncesto es sin duda uno de los deportes más tácticos del fútbol americano), sitúo el lado táctico como el último factor en el sentido de que hay que conocer muchos datos, pero una vez que se dominan, mantienen las mismas características generales sea cual sea el nivel. Por supuesto, la precisión y la relevancia de las elecciones del entrenador dentro de estas tácticas se trabajan y, por supuesto, tienen un impacto significativo a medida que avanzamos hacia las divisiones superiores.
Capacidad de adaptación al perfil del equipo contrario. Cada equipo está compuesto por jugadores con preferencias de juego, características específicas y opciones de prioridad.
Capacidad del entrenador para analizar rápidamente los sectores defensivo y ofensivo del rival con el fin de adaptarse.
Lo mismo ocurre con el ataque y la defensa de su equipo, el entrenador debe ser capaz de saber si el problema proviene de su propio equipo (falta de respeto por las instrucciones, infortunios…) o si estos fallos son causados por el oponente.
Preparación del partido (información sobre el adversario – defensa favorita, principales anotadores del adversario…). Capacidad para adaptarse a los diferentes tipos de tácticas que se ofrecen en el otro lado dependiendo de la defensa (Zonas, Individual, Trappe, Prensa Off-road…………) o ataque (Rápido o medio juego de campo, más bien en golpes, fuera o dentro del juego, juego de pantalla……).
La capacidad del entrenador para gestionar el tiempo de inactividad (gestión de la fatiga o gestión táctica), gestionar el cambio (gestión de fallos, gestión de la fatiga o gestión táctica – dependiendo de las dificultades del oponente o de los jugadores….)
Por lo tanto, el desempeño depende de una serie de factores, todos los cuales son de gran importancia en la medición o, si hay desempeño, es porque fuimos más allá de las proyecciones (basadas en los objetivos y por lo tanto en el potencial en el momento T). Si esto ocurre, es porque se ha hecho todo lo posible para cumplir el objetivo inicial y, por lo tanto, se ha jugado con los detalles. Dado que cada factor tiene múltiples implicaciones, es necesario dominar todos estos elementos con precisión si queremos conseguir el rendimiento que todo el mundo está buscando.
CONCLUSIÓN
Si informamos de esto al entrenamiento del joven jugador, verás que muchos parámetros entran en juego para hacer que el jugador alcance su nivel de potencial más alto. Es un proceso largo y hay que proceder por etapas. Por eso es importante tener un eje, un plan de formación a lo largo de varios años. Debe definir sus propias prioridades y factores de rendimiento. Luego, por supuesto, viene toda la pedagogía y la adaptación al individuo. Cada jugador no siempre responde a los mismos estímulos.